Tras un embarazo sin ningún síntoma de parto, tras varios monitores, me dan cita para ingreso programado el día 19 de Marzo, a las 41+3 semanas.
A las 8:00 tenemos que presentarnos por el acceso de urgencias. Nos atienden y nos llevan a una habitación. Me explican el proceso, primero me pondrán pastillas en el útero cada 4 horas. Me ponen una vía y primer monitor. Me ponen 2 patillas, a las 12:00 y a las 16:00. Deciden no ponerme más pastillas. Paso la noche sin ningún síntoma y la mañana del 20 de Marzo me llevan a una sala de dilatación.
En la sala de dilatación me vuelven a explicar el proceso. Me pondrán
oxitocina, aumentando la dosis poco a poco para intentar que me ponga de parto.
Me van subiendo la dosis, 3, 6, 12… Comienzan algunas contracciones muy
soportables. Sobre la 1 del medio día deciden romperme la bolsa. En ese
momento, cuando todavía están realizando la maniobra, comienzan dolores
insoportables, contracciones muy seguidas y muy dolorosas. Me informan que el
líquido está manchado y que cuando mi hijo nazca tendrán que llevárselo para
aspirar las vías.
Poco tiempo después solicito la epidural porque los dolores son insoportables. Estoy dilatada de 4cm. Viene la anestesista y me tengo que sentar en la cama. Me pide que no me mueva, que si noto una contracción lo indique para que para el procedimiento mientras dura el dolor. Cuesta mucho no moverse en cada contracción. Una vez está la epidural puesta, el efecto es inmediato y los dolores se reducen, se vuelven muy soportables. Incluso me duermo durante unos minutos.
Sobre las 19.00 aumenta el dolor. Dilatación 8-9cm y en posición. A las 20:30
dilatación completa pero no termina de bajar. Me piden que empuje, estoy
durante varias horas empujando y me piden que empuje más. Llega un momento en
el que estoy agotada, no me quedan fuerzas para seguir empujando.
Hasta las 23:00 no vamos a paritorio. Al papá le dicen que espere fuera a que le avisen pero no le avisan. El bebé no termina de bajar y necesitan usar espátulas. A mí no me quedan casi fuerzas, llevo 3 horas empujando. A las 23:35 nace y se lo llevan a aspirar. Yo estoy completamente agotada, me empiezo a encontrar muy mal y vomito. Tardan mucho tiempo en coserme, parece que hay muchos pequeños desgarros, cosen uno pero sigo sangrando. Pierdo mucha sangre. Mientras tanto, el papá hace piel con piel con el bebé.
Cuando terminan de coserme, por fin puedo coger a mi bebé, tengo muy poca fuerza pero se saca de donde sea para poder tenerlo. Las horas siguientes fueron muy duras, me tuvieron que hacer una transfusión de sangre y la recuperación fue muy lenta sin poder andar prácticamente durante un mes. Pero la recompensa del esfuerzo era enorme. Te quiero Nico.
Era mi segundo embarazo. Su hermano había nacido a las 41+4 semanas en un parto provocado por no ponerme de parto ni tener ningún síntoma. Con ella parecía que todo llevaba el mismo camino, ningún síntoma de parto. La noche del 19 de Julio me desperté con contracciones dolorosas. Como son cada 4-5 minutos, decidimos ir al hospital.
Al llegar al hospital, me hacen un monitor y me dejan ingresada porque parece que estoy de parto. Conforme pasa el tiempo, las contracciones disminuyen y llegan a desaparecer. Por la mañana, me ofrecen quedarme ingresada a esperar o irme a casa y volver cuando note contracciones otra vez. Como Nico solo tiene 2 años, decidimos volver a casa para poder estar con él el tiempo que podamos. Pasa el día y en la noche del día 20 vuelvo a despertarme con contracciones. Esta vez son más fuertes pero cada 15 minutos. Decidimos volver al hospital porque son muy fuertes. Cuando llegamos a urgencias, las contracciones son más frecuentes y no puedo casi andar. Me llevan con la silla de ruedas.
Son las 3:30 y me llevan directamente a monitores. Los dolores son muy fuertes. Cuando por fin vienen a verme ya no aguanto más, me miran dilatación y pido epidural. Estoy dilatada de 8cm. Me piden que me cambie la ropa entre contracción y contracción (con muy poco tacto, por cierto). Rompo aguas en ese momento. Cuando llega la anestesista y me siento noto ganas de empujar. Me vuelven a tumbar y me miran, estoy en dilatación completa. Voy a parir sin epidural.
Todo es muy rápido. Me llevan a la sala de expulsión y en pocos empujones, noto como nace mi bebé. Son las 4:35. Como las aguas habían sido sucias, se la llevan a aspirar y después me la traen. Ha sido un parto rápido y muy doloroso, pero ya está conmigo. Te quiero Luna.